Siempre es un placer grabar conciertos de música clásica.
Pero en este caso supone una ocasión muy especial, ya que mi sobrina Martina, de 12 años, de la cual estoy muy orgulloso, toca por primera vez en la Orquesta de Cámara Actur Filarmonía, y no quería perdérmelo.
Espero que lo disfrutéis :).